Esto es lo mejor que hemos podido escuchar los #chocolovers en mucho tiempo y lo maravilloso de esta noticia es que además de desmontar un mito de raíces antiquísimas, es un estudio científico el que avala esta conclusión.
En efecto, un equipo de investigadores de la facultad de medicina y la facultad de ciencias del deporte de la Universidad de Granada en España analizaron si un mayor consumo de chocolate se asocia con un mayor o menor índice de masa corporal, así como otros indicadores de grasa corporal total en 1458 adolescentes que participaron en el estudio Helena (Healthy Lifestyle in Europe by Nutrition in Adolescence).
Los resultados de este estudio mostraron que un mayor consumo de chocolate se asoció con niveles más bajos de grasa total, según lo estimado por el índice de masa corporal, el porcentaje de grasa corporal y el perímetro de cintura.
Aunque el chocolate está considerado como un alimento con un alto aporte energético, otros estudios realizados en adultos sugieren que su consumo se asocia con un menor riesgo de trastornos cardiometabólicos.
Asimismo, otro estudio desarrollado en adultos por científicos de la Universidad de California observó que una mayor frecuencia en el consumo de chocolate también se asocia con un menor índice de masa corporal.
Este efecto podría deberse, en parte, a la influencia de las catequinas (flavonoides presentes en el chocolate) sobre la producción de cortisol y la sensibilidad a la insulina relacionados con el sobrepeso y la obesidad.
Sin embargo, los científicos de la Universidad de Granada insisten en la necesidad de ser moderados en el consumo de chocolate, ya que su consumo en exceso puede ser prejudicial para la salud, como todo en esta vida.
Pero estas advertencias no nos frenan a la hora de comer chocolate porque aunque tengamos que comer el chocolate con moderación, siempre podemos tener a la mano un delicioso Sin Azúcar o un Passion Noir para disfrutar el placer del chocolate sin culpas de ningún tipo.
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